Latinoamérica tendrá su primer hospital para víctimas de violencia sexual

La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de Colombia inauguró este miércoles la primera piedra del Hospital de la Paz, el primer centro en el país y en América Latina dedicado a atender a víctimas de violencia sexual en el contexto del conflicto armado. El hospital ofrecerá servicios médicos, psicológicos, jurídicos, económicos y sociológicos para brindar apoyo integral a las víctimas, escuchando sus necesidades y proporcionándoles acompañamiento físico y psicológico.

Además, el hospital funcionará también como centro de atención materno-infantil para toda la región de la Orinoquía, ya que, en muchas ocasiones, las mujeres que sufren complicaciones en el parto tienen que ir a Bogotá para ser atendidas.

«Se hace realidad el sueño de las víctimas y de la JEP», anunció el director de la Unidad de Investigación y Acusación de la JEP, Giovanni Álvarez, sobre un proyecto que espera ser una referencia a nivel internacional y que pueda llegar a atender a las víctimas de violencia sexual no solo del conflicto, sino a todo el que no necesite.

En Colombia, como han documentado varias organizaciones, incluida la Comisión de la Verdad, la violencia sexual ha sido utilizada como arma de guerra contra las mujeres, y es el país latinoamericano con mayor número de víctimas: más de 15.700, en un crimen de guerra tremendamente infradocumentado y poco reportado porque aún hoy es un tabú.

El lanzamiento del Hospital de la Paz en Colombia fue acompañado por el ginecólogo congoleño Denis Mukwege, galardonado con el Premio Nobel de la Paz en 2018 por su trabajo con víctimas de violencia sexual en la República Democrática del Congo. Durante el evento en Cumaral, Meta, Mukwege expresó que está viviendo «los mejores días de su vida» debido a los avances en Colombia, algo que había soñado para un país como este.

El médico, pionero en la creación de un Hospital de Paz en la RDC, destacó que este nuevo centro en Colombia, el primero en Latinoamérica, seguirá el modelo de atención a mujeres víctimas de violencia sexual en conflictos bélicos.

«El país ha visto momentos muy oscuros y sombríos pero por fin estamos viendo la luz al final de todo», agregó Mukwege con motivo de la celebración del octavo aniversario de los Acuerdos de Paz. El ginecólogo reivindicó que lo peor de una guerra es «el sufrimiento de las mujeres y los niños, que tienen que vivir con miedo el resto de su vida y transmitirle estos miedos y sufrimientos a otras generaciones», y afirmó que este hospital «va a arreglar el tejido social destruido por la guerra».

El ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, expresó que este centro de salud, que «será una réplica del Hospital del Congo», no será solo para víctimas del conflicto: «se especializa en mujeres y en niños pero va a tener todo tipo de especialidades en Medicina y por ello atenderá a todo el que lo necesite».

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